10 consejos para protegerse del sol en verano
El anhelado verano ha llegado. Atrás quedan los días fríos de invierno y por fin podemos ir a la playa a disfrutar del mar, del buen ambiente y del sol. Pero… cuidado con el sol. Para no sufrir sus efectos indeseados, como pueden ser hiperpigmentaciones, irritación o alteraciones malignas en la piel, hay que protegerse.
Es en verano cuando la intensidad de los rayos ultravioletas es más fuerte. Sabemos que los rayos ultravioletas del sol son dañinos para la piel, por lo que es fundamental seguir ciertas precauciones y, aunque en verano hay que hacerlo con mayor precaución, es conveniente protegerse durante todo el año.
Las quemaduras solares pueden provocar escozor o picor y resultan muy incómodas. Además, si exponemos nuestra piel todos los días al sol sin utilizar protección y no ponemos medidas, nuestra piel puede tener más probabilidades de padecer un cáncer de piel, ya que esta tiene memoria.
No te preocupes, a continuación te vamos a dar 10 consejos para protegerte del sol en verano.
Tips para protegerse del sol y no sufrir quemaduras en verano
- Elegir el factor de protección adecuado para cada tipo de piel. Como mínimo debemos utilizar un factor solar del 30, pero va a depender del tipo de piel. Si nuestra piel es sensible y pálida o en ancianos y niños, el factor solar tiene que ser mayor. Los bebés de menos de seis meses no deben tomar el sol.
- Utilizar suficiente crema protectora. Una vez elegido el factor adecuado, deberás aplicarte la crema al menos 30 min antes de la exposición, extendiendo de forma uniforme una cantidad generosa (unos 35 gramos por aplicación). Además, tendrás que renovar la aplicación cada 2 horas o cada vez que se salga del agua. Todas las partes del cuerpo deben ser protegidas.
- No pasarse con el tiempo de exposición solar. Todos los excesos son malos, tomar el sol unas horas al día es bueno, pero si por el contrario pasamos todo el día al sol podemos sufrir quemaduras, junto a otros efectos como deshidratación o insolación.
- Evitar el sol a mediodía. Las horas del medio día son las que el sol es más peligroso. Los rayos ultravioletas son más potentes y es cuando somos más susceptibles de sufrir eritemas solares. Así que en la medida de lo posible, debemos evitar exponerse al sol a medio día. De 12:00 a 16:00 horas no tomes el sol.
- Beber agua y demás líquidos. Es importante mantener la piel hidratada, pero también lo es mantener el interior hidratado. Se recomienda en el caso de los hombres de 2.5-3 litros por día y las mujeres, 2-2.5. El consumo de fruta de temporada y alimentos líquidos también es una gran opción para hidratarte.
- Llevar ropa adecuada. Es verano y hace calor, no utilices ropa abrigada. Es tiempo de llevar ropa ligera. Sin embargo, en caso de personas de fenotipo I, niños y/o en caso de una larga y repetida exposición, (como surfers) se recomienda llevar barrera física, como camisetas de manga larga, sombrero o gorra.
- Utilizar gafas de sol. Es fundamental protegerse los ojos con gafas de sol. Los ojos son muy sensibles y por tanto, tenemos que cuidarlos. Las gafas deben estar homologadas, con filtro para los rayos ultravioletas.
- Cuidado con los medicamentos. No se aconseja tomar el sol cuando hemos tomado ciertos medicamentos, aun utilizando protección. Es importante que sepamos si el medicamento que estamos tomando puede producir fotosensibilidad, como es el caso de algunos antiinflamatorios, anticonceptivos, antibióticos, etc. Puedes verlo en el prospecto y, ante la duda, pregunta siempre a tu farmacéutico.
- No realices sobre esfuerzos físicos. Los esfuerzos físicos a altas temperaturas no son buenos. Además de que puedes quemar tu piel, también puedes sufrir un golpe de calor. Entre las 10:00 y las 17:00 horas hay que evitar actividades al aire libre en los meses de verano.
- Crema para después del sol. Es muy importante utilizar una crema hidratante después de tomar el sol. La crema solar actúa como protectora de las radiaciones solares, pero después necesitamos hidratar la piel. Los After Sun tienen un efecto calmante sobre la piel y son imprescindibles para que la misma luzca sana y bronceada. Pero no hay que confundirlo con una crema para piel que presente eritema solar y rojez, como Blastoactiva de Almirall. Estas cremas aportarán nutrición a la piel, que ha sufrido durante horas una agresión solar, reparándola en profundidad.
Siguiendo estos tips podrás disfrutar con tus amigos y familiares tanto en la ciudad, como en la playa o montaña sin problemas. Sin embargo, si sufres algún eritema solar puedes utilizar una crema reparadora como Blastoactiva de Almirall, que está testada dermatológicamente, ya que regenera y renueva la piel hidratándola y nutriéndola en profundidad.
Si sigues los consejos que te hemos dado no tienes por qué preocuparte. No cuesta nada tomar precauciones para protegerse del sol y no sufrir quemaduras solares que nos pueden fastidiar el ansiado verano. ¿Vas a arriesgarte? No merece la pena.
Mª Luisa García García – Licenciada en Farmacia
NºCOLEGIADA 2532 – COF de Badajoz